LIRIOS DE UTAH

Otra historia acerca de cómo el lirio de sego llegó a ser la flor estatal sostiene que, a mediados del siglo XIX, una plaga de langostas arrasó Utah y devoró las cosechas. Por causa de la escasez resultante, la gente tuvo que racionar los alimentos. Aprendieron, entonces, a ingeniárselas para encontrar algo de comer, incluso cavando para extraer y comer la raíz bulbosa de este lirio.
No sabemos si el Estado de Utah eligió el lirio por la encuesta hecha entre los niños en edad escolar o por la ayuda nutricional que brindó durante la hambruna. De cualquier manera, la belleza de la flor, probablemente, ayudó a que la legislatura la eligiera como la flor de su Estado.
Pero, si alguna vez viste lirios, entenderás lo que quiso decir Jesús cuando dijo: "Fíjense cómo crecen los lirios. No trabajan, ni hilan; sin embargo, les digo que ni siquiera Salomón, con todo su esplendor, se vestía como uno de ellos. Si así viste Dios a la hierba que hoy está en el campo y mañana es arrojada al horno, ¡cuánto más hará por ustedes, gente de poca fe!".
Recuerda: Dios creó los bellos lirios. Si él cuida de algo que está aquí un día y es tirado fuera al día siguiente, ¿no crees que pueda cuidar de ti? Por supuesto que puede... ¡y lo hará!.
Extraído de "EN ALGUN LUGAR DEL MUNDO" - Pág. 223
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